Las ceras de baja fusión están elaboradas a partir de cera de abeja. Además, su combinación con las resinas, llamadas Colofonias, hace que se adhieran perfectamente a la piel de los clientes, ablandando el poro y favoreciendo la extracción del pelo.
La cera de baja fusión profesional arranca el vello de raíz, ayudando a retardar su aparición. Asimismo, es apta para todo tipo de pieles y, gracias a su textura, proporciona una depilación suave, facilitando el tirón y sin provocar rojeces indeseadas.
Las ceras de depilación de baja fusión incorporan dióxido de titanio, proporcionando una consistencia más elástica y cremosa. Así, la cera depilatoria con baja temperatura o temperatura ambiente se recomienda calentarlas hasta 70ºc y dejarla enfriar hasta su aplicación.
La cera depilatoria de baja fusión permite realizar 2-3 aplicaciones de cera. Al utilizar una buena temperatura prologarás la vida útil de la cera en un 20%.
Después de llevar a cabo la depilación, se recomienda utilizar un aceite para refrescar y calmar la piel. Además, te ayudará a quitar parte de la cera que puede haber quedado pegada. Los expertos recomiendan que no se tome el sol una vez hecha la depilación, pues podrán aparecer manchas y quemaduras de forma más rápida.
La rapidez del crecimiento del pelo en la piel varía según la persona. Pero, puede tardar hasta 4 semanas en crecer.